Lo más buscado
No se encontraron resultados
- Escribir un artículo
- Publicar debate
- Crear una lista
- Subir un video
Pedro Opeka declinó la oportunidad de jugar fútbol profesional en su natal Buenos Aires. En cambio, eligió convertirse en misionero y vivir en uno de los países más pobres del mundo. Hijo de un albañil, convenció a las familias indigentes que vivían en el vertedero más grande de Madagascar de que podía enseñarles cómo construir sus propias casas y, en el proceso, construir su dignidad. Después de 30 años de construcción, luchando contra la creciente pobreza y la inestabilidad política, Opeka ha creado una ciudad altamente funcional dentro de esta disfuncional nación africana. Su misión es preparar a los niños que salva para que un día salven a su propio país.