The Rising

Se quedó allí mirando el pasillo, su respiración era tan pesada como la oscuridad. Tratando de averiguar dónde estaba. ¿Por qué está pasando esto? ¿Quien era él? Todo en lo que podía pensar era en Ty y lo que le estaba haciendo. No hay salida. Entonces lo vio, en el suelo. Su instinto fue correr hacia él. Estaba vivo, herido, pero vivo. Vio sangre, corrió hacia él con cada onza de su ser. Levanta la cabeza y susurra no, no, está aquí. Se derrumba del dolor. Ella lo alcanza, él está cubierto de sangre. Él está fuera de sí. Ella le dice, por favor no me dejes. Te necesito. Te amo. Luego, por el rabillo del ojo, ahí está él. Esta "cosa" alta, de pelo oscuro. De pie. Mirando. Sabe que no puede correr, que no tiene adónde ir. Las lágrimas corren por su rostro cuando él la agarra y desaparecen en la oscuridad.