El gran robo (1982)

Cuatro hombres cuyo intelecto combinado no alcanza los tres dígitos deciden robar una caja fuerte llena de moneda extranjera, no de un banco local, sino de la estación de policía. Basado en un incidente de la vida real, el guión de esta comedia dramática de payasadas fue coescrito por un policía, también dramaturgo, Haim Merin, que le da cierta voz de autoridad al escenario, y al director, Jacob Goldwasser. El punto culminante cómico de la película es cuando los cuatro ladrones se abren camino a trompicones y golpes a través de la estación de policía, mientras que el policía de guardia sigue dormido en una feliz ignorancia. Los ladrones pueden tener más fuerza que la materia de Gery, más productos químicos que Dow y más suerte que previsión, pero logran el robo supuestamente imposible. Sin embargo, a partir de ese momento, la suerte disminuye a medida que su codicia supera su comprensión de cómo seguir su éxito.