La vita rubata (2008)

Esta película cuenta la historia real de Graziella Campagna, una joven siciliana de 17 años asesinada por la mafia, y la lucha de sus familiares por obtener justicia. Graziella Campagna trabajaba en una lavandería. Un día un cliente olvidó su libreta en un trapo. Lo encontró y se lo entregó a su supervisor, quien se lo devolvió al cliente. Esta fue la sentencia de muerte de Graziella. El cliente, en realidad, no era el ingeniero Toni Cannata, como decía, sino el capo de la mafia Gerlando Alberti. Temiendo que ella pudiera haber sabido la verdad y también los nombres de sus cómplices, el mafioso dejó torturarla y matarla. La película cuenta su historia y la historia de las siguientes investigaciones y juicios. La participación de Piero Campagna, hermano y policía de Graziella, en las investigaciones contribuirá a destapar una red de connivencias y desvíos incluso a nivel institucional.