Preludio (2020)

Rubén, un inexpresivo dependiente de librería cansado de su rutina laboral, al final de su turno se encuentra con una clienta que se niega a salir de la librería antes de terminar un libro de poemas. Comprender que solo le queda un poema le permite quedarse y terminar; pero luego agrega que sin música no puede leer. Rubén le informa que está prohibido tocar música a esa hora, por lo que ella le sugiere que tararee. Inicialmente rechaza la propuesta, pero ella logra convencerlo. Poco a poco se deja llevar por el tarareo y es interrumpido cuando el cliente lee en voz alta. Rubén está cautivado con la estrofa que lee. Conmovido y desconcertado, Rubén la ve irse. De pie frente al escaparate de la tienda, como todas las noches, se queda solo en la librería pero esta vez añorando lo que ella le hizo sentir.