Havana Divas (2018)

Caridad Amaran y Georgina Wong aprendieron el arte de la ópera cantonesa en la Habana de los años 30. El mentor de Caridad fue su padre adoptivo, Julian Fong, quien emigró a Cuba en la década de 1920 después de que su familia le prohibiera tocar ópera. El padre de Georgina era un sastre famoso en Chinatown, quien la animó a aprender Kungfu y la danza del león. Aunque ambos eran hijos solteros, formaron una hermandad en el escenario. A lo largo de la década de 1940, Caridad recorrió ciudades de toda Cuba con las comunidades chinas, como una de las actrices principales de la compañía de ópera. Georgina dejó la ópera para asistir a la universidad, pero su estudio fue interrumpido por la revolución de Castro en 1959 y su servicio militar obligatorio. Finalmente, se convirtió en diplomática. Después de jubilarse y bien entrados en los sesenta, las dos hermanas intentan volver a interpretar ópera cantonesa. ¿Encontrarán un escenario? ¿Encontrarán público?