Aunque no hay sangre ni violencia espantosa, aun así puede resultar intensa para los espectadores más jóvenes.
David se encuentra en la oficina de su maestra y camina detrás de ella, mientras ella le da la espalda. Cuando se acerca a la maestra, ella se da vuelta con media rana en la boca. David observa con horror cómo termina de comerse la rana. Entonces la maestra le dice a David que no debe estar allí.
Algunas escenas de persecución leves entre David y algunas figuras de autoridad adultas.
Cerca del final de la película vemos a dos hombres desintegrados por una de las armas de los alienígenas. Nuevamente no hay sangre, pero puede resultar intensa para los espectadores más jóvenes.
Los extraterrestres atan a las personas a una mesa mientras una criatura alienígena con forma de cerebro emerge y usa una aguja larga: penetra en la parte posterior de sus cuellos para implantarles un dispositivo para controlarlos.
Más tarde, cuando David escapa de la nave, una mujer es empujada hacia uno de los alienígenas y este la devora viva. Una vez más, no hay nada gráfico y está hecho con humor. Sin embargo, puede resultar intenso para los espectadores más jóvenes.
Dos hombres que han sido controlados por los extraterrestres sufren convulsiones en el suelo y mueren.
Toda la violencia se presenta de forma muy irónica, pero para los espectadores más jóvenes puede resultar intensa.