The Half-Way Girl (1925)

Cuando su grupo teatral itinerante quiebra, Poppy, una actriz de la compañía, se encuentra varada en Singapur. Se ve reducida a trabajar en un bar en la parte sórdida de la ciudad como "anfitriona", donde conoce a un inglés con mala suerte. Mientras está borracho, se pelea y se ve obligado a matar a su oponente en defensa propia. La niña lo ayuda a escapar y acude a Sam, el turbio propietario de una plantación, para tratar de sacarlos de Singapur. Sin embargo, Sam tiene sus propios planes para Poppy y no incluyen rivales potenciales por su afecto.