La reina de la moda (1927)

Céleste de Givray, cuyo éxito social es el resultado de la audacia de su agente de prensa, Sam Dupont, es persuadida de retirarse de la vida pública y hacerse levantar la cara. Sam contrata a Lola Dauvry, una cigarrera del Café Pierre, que ama a Raoul de Bercy, un ex aviador, para que se haga pasar por la nueva Céleste en un desfile de moda, mientras que Raoul es contratado como aviador privado de Céleste. Mientras Raoul espera a Lola en el apartamento de Céleste, llega el duque de Arles, uno de los novios de Céleste; desesperada, Lola le ruega a Sam que le informe a Raoul sobre su identidad, pero él se niega. En el desfile de modas, Céleste aparece y declara a Lola una impostora, pero esta última es declarada "la mujer mejor vestida" por los jueces. Raoul, al darse cuenta de que Lola ha sido fiel, regresa con ella en el café y se reencuentran felizmente.