La condesa de Montecristo (1934)

Dos extras de cine en un estudio austriaco, Janet y Mimi, no lo están haciendo tan bien en sus trabajos, huyen de sus trabajos con uno de los autos de lujo del estudio y ropa de utilería cara. Se detienen en un exclusivo hotel de montaña, donde los toman por una condesa y su criada. Justo antes de que sean expuestos, se utiliza un robo para cubrir sus propiedades y fondos inexistentes, aunque el ladrón resulta ser un ladrón afable y conspirador que se hace pasar por un barón que ahora exige que Janet se convierta en su compañera. Otro invitado, también de origen dudoso, se convierte en su protector, pero se produce un enfrentamiento cuando las autoridades se acercan a todos ellos.