Cheap Shot (2004)

Una pandilla de jóvenes matones inofensivos se ganan la vida a base de pequeños golpes. Tras un atraco fallido, se encuentran con la imposibilidad de saldar sus deudas con el cacique local, quien, para pagarle, les ofrece el robo de una fundación de arte moderno. Pero nada sale según lo planeado y todo está conectado, mal. Así que la alarma que debería haber sido desenchufada no lo está, y uno de los matones queda inmediatamente atrapado en una de las salas del museo. Para sacarlo de allí, el equipo tiene que robar una ferretería para conseguir algunos suministros, pero llega la policía y se llevan a un segundo. Otro miembro del equipo a liberar y otra parte del plan que no sale como estaba previsto: se ven obligados a ocupar la comisaría. Y, para no alertar a las comisarías vecinas y llevar a cabo su proyecto inicial, los matones no tienen otra solución que sustituir a los policías reales.