El protagonista está enviando mensajes de texto mientras conduce. Atropella a un hombre que cruza la calle, que se sube al capó y se estrella la cara contra el parabrisas, algo gracioso. Sale ileso y muy animado.
Un hombre tiene el brazo atascado en un ascensor. Su amigo le ayuda a liberarlo, pero cuando caen por el tirón, se lastima la espalda y parece tener mucho dolor.
Una mujer persigue a otro hombre. Toda la persecución es muy cómica. Ella cae sobre una barandilla y cuando se levanta, se ve que tiene la boca sangrando. Ella sisea: "Vas a morir".
Ella le arroja botellas de vino al hombre, quien las esquiva, y él inevitablemente finge hacerse el muerto para que ella se vaya.
La misma mujer luego golpea su auto con un poste de la cola, destrozándole los faros y las ventanas.
Un hombre ciego, que dice ser esgrimista, corta accidentalmente el dedo de otro hombre. Hay muy poca sangre y toda la escena es para reírse. El dedo parece falso.