Når øyeblikket synger (1995)

Este documental ofrece una imagen colorida y humorística de africanos felices y rítmicos frente a europeos rígidos y sin ritmo. Los africanos cantan y bailan mientras cuidan a los niños, trillan el grano, serran leña, dirigen el tráfico y colocan traviesas de tren. Para ellos, la música es una parte indispensable del trabajo y el ocio. "Tanto los europeos como los africanos nacen con el ritmo en el cuerpo, pero los europeos lo han perdido", afirma el filósofo musical John Collins en la película. El profesor de música Jon Roar Bjørkvold enfatiza la importancia del ritmo para el cuerpo y el alma y habla apasionadamente sobre "el ser humano musical" basándose en la música africana y el desarrollo humano en general. La película pone patas arriba las viejas nociones de que la música "primitiva" es menos valiosa que la música "clásica" europea.