Greta Garbo

“Ojalá los que sueñan con Hollywood supieran lo difícil que es todo”. Greta Garbo fue una actriz sueca, nacionalizada estadounidense, que se convirtió en ícono de Hollywood durante las décadas de 1920 y 1930 gracias a su destacada participación, tanto en el cine mudo como el sonoro. Inició su carrera como modelo publicitaria en Estocolmo y en 1920 comenzó a actuar; estudió en la Escuela de Arte Dramático y obtuvo su primer papel protagónico en La saga de Gosta Berling (1924). Al año siguiente fue contratada por los estudios Metro Goldwyn Mayer, motivo por el cual se trasladó a Hollywood y fue allí donde construyó su emblemática carrera. Llegó al éxito con El demonio y la carne (1926), y Ana Karenina (1927). Fue rápidamente apodada como “La mujer que no ríe”, por sus condiciones para el género dramático y convenció tanto al público como a la crítica con su naturalidad ante las cámaras. Con el famoso eslogan “¡Garbo habla!” se publicitó el estreno de su primera película sonora Anna Christie (1930), que le valió su primera nominación a los Premios Óscar. Su papel en Ninotchka (1939) de Lubitsch, también fue muy elogiado. Se mantuvo siempre reservada con respecto a su vida privada, y es por eso que los paparazzis la acosaron constantemente. Se retiró con tan solo 36 años. Su carrera, aunque breve, dejó una marca indeleble en la industria del cine, Garbo es considerada una de las estrellas femeninas más importantes de la historia.