Wicked: Rindiendo un digno homenaje al musical

Luego de ver la película por primera vez, en el viaje de regreso a casa con mi madre (quien conoce el musical gracias a mi insistencia con el mismo),tras varios segundos de silencio me comentó: “Sentí que se me estrujaba el corazón cuando vi a Elphaba tomar la escoba y ponerse el sombrero”, y creo que eso podría definir de qué se trata todo esto: Que la gente sienta, desde el fanático que escuchó Defying Gravity en 2009 con Glee y se enamoró perdidamente, quien conoció “Popular” gracias a la versión de Ariana Grande en 2013, hasta la persona que tiene una mínima idea de lo que viene a ver o que el titulo o alguien del elenco captó su atención

Personalmente fui de esas personas que descubrió el musical gracias a Ariana Grande hace ya más de una década, y una vez que comencé a investigar de qué se trataba no pude parar, así que voy a ir pidiendo perdón de antemano si esta reseña no es del todo subjetiva, espero sepan entender, ha sido un largo tiempo esperando ver este musical en la gran pantalla, pero déjenme adelantarles que sin duda la espera, la cual por momentos se sintió eterna, valió la pena.

Tras dos décadas siendo uno de los musicales más longevos en escena, posicionándose en el cuarto puesto con casi 8.000 funciones hasta la fecha, y de los más aclamados por el público y la crítica WICKED finalmente se estrena este 21 de Noviembre en la gran pantalla.

La historia no contada de las brujas de Oz, está protagonizada por la ganadora de un Emmy, un Grammy y un Tony Cynthia Erivo en el papel de Elphaba, una joven marginada por su inusual color verde de piel y quien posee un poder aún no descubierto.

Como co-protagonista tendremos a la superestrella pop, Ariana Grande, interpretando a Glinda, una popular joven marcada por sus privilegios y su ambición, quien aún no logra descifrar su verdadera pasión.

Los caminos de ambas se cruzan en la Universidad de Shiz, en la fantástica Tierra de Oz y forjan una inesperada pero profunda amistad.

Tras un encuentro con el Maravilloso Mago de Oz, su amistad llega a una disyuntiva y sus vidas acaban por tomar caminos muy diferentes, llevándolas a cumplir sus respectivos destinos como Glinda, la Bruja Buena, y la Malvada Bruja del Oeste.

Últimamente a los musicales no se los trata como tal, cuando vemos trailers o siquiera videos promocionales de los mismos los directores y quienes editan dichos videos parecen tener una misión clara: Ocultar que de un musical se trata. Cualquier cuadro musical o siquiera una pequeña entonación es descartada, logrando vender al público general un contenido que no es el verdadero y ganándose el odio de los “theather kids”, o de la gente que disfruta de ver musicales, y con justa razón.

Jon M. Chu, quien dirige estas dos partes, decidió finalmente dar vuelta las reglas del juego y tratar a los musicales como se merecen. No recuerdo un solo trailer o teaser que no contuviese una canción, desde el momento uno se les recuerda a todos que sí, lo que van a ver es, efectivamente, un musical.

Sin duda alguna estamos ante uno de los mejores (por no decir el mejor) musicales de los últimos tiempos. Esto es Broadway traído a la gran pantalla, lo más cercano al escenario que -de momento- vamos a tener aquellos que vivimos lejos de los lujosos y decorados teatros situados en Midtown Manhattan, Nueva York, con una puesta en escena brutal, una historia sumamente poderosa, con voces talentosas y fuera de este mundo que te hacen sentir cada entonación como si fuese la primera vez que escuchas las tan icónicas y sabidas canciones. Es un proyecto que ha sido tratado con el cariño y respeto que esta historia merece, dirigido y protagonizado por personas que se han proclamado en reiteradas ocasiones fanáticos del musical (y de los musicales en si) y se nota en cada cuadro.

Ariana Grande, quien da vida a Glinda, ha dejado en claro que este siempre fue su rol soñado y para el cual se estuvo preparando gran parte de su vida. Y no mintió cuando dijo que amaba este personaje e iba a cuidar bien del mismo, ya que decidió darlo todo, destacando en las escenas cómicas y dejando en evidencia que Kristin Chenoweth ha servido como mentora y como su más grande referencia para traer a la gran pantalla a este personaje.

Pero no nos dejemos engañar, a pesar de la cercanía entre Grande y Chenoweth y los consejos que nuestra amada Glinda original haya podido darle, Ariana hace su propia interpretación del carismático personaje desde la primera escena, cautivandonos con su pomposo vestido en tonalidades rosa, el icónico viaje en burbuja y su melodiosa voz al entonar “No One Mourns The Wicked”, quien dejará a más de uno con la piel de gallina.

Cynthia Erivo, quien representa a la tan emblemática y poderosa Elphaba no se queda atrás ni por un segundo. En palabras del director de este filme al escogerla para el papel: “Cynthia era tan pura y vulnerable, que no podía sacármela de la cabeza” y fue exactamente lo que me sucedió una vez que abandoné la sala de cine, no podía quitarme de la cabeza varias de las escenas protagonizadas por Erivo, su naturalidad y fortaleza, o esa voz potente que transmite sentimiento puro en cada nota y te hace desear que la película jamás acabe para seguir escuchándola cantar.

Ambas no solo son unas auténticas “theater kids” sino que se comprometieron a darlo absolutamente todo en el filme. Desde sus actuaciones, hacer sus propias escenas de riesgo, hasta aventurarse en la difícil tarea de cantar cada canción en vivo, uno puede palpar el cariño que hay detrás.

Y si de actores que sorprenden hablamos no puedo dejar pasar por alto que Jonathan Bailey, quien encarna a Fiyero, nos muestra una vez más que no sólo posee talento para la actuación, sino también para el canto y el baile, brindándonos un número musical extraordinario al ritmo de “Dancing Through Life”, canción donde despliega todo su abanico de habilidades y los pone en práctica. Será sin duda otro actor que estará en boca de todos.

Este es un proyecto que, a riesgo de sonar repetitiva, se siente como una caricia al alma para todos los fanáticos de los musicales y el teatro, para aquellos que se atreven a soñar explorando mundos nuevos, quienes encontraron un refugio o escape en la narrativa o en las canciones, para quienes se sintieron identificados con alguno de sus personajes o que la historia contada resonaba con lo que sucedía en sus vidas, y para los que jamás bajaron los brazos en la ardua lucha de tener actualmente una adaptación digna de esta historia tan significativa.

Hay una escena que sin lugar a dudas es la que usaría para ejemplificar cómo esta adaptación es rendirle homenaje por completo al musical, pero contiene spoilers así que si aún no viste la película te recomiendo que dejes de leer y retomes luego de salir del cine.

En el número musical de “One Short Day”, cuando nuestras protagonistas recorren juntas la Ciudad Esmeralda se da el cameo más esperado por los fanáticos del musical: La aparición de las talentosas Idina Menzel y Kristin Chenoweth. Lo que podría haber sido un cameo de cinco segundos se transforma en una especie de “pase de posta”, con las Elphaba y Glinda que marcaron Broadway en 2003 interactuando con las actuales, en una escena de lo más cómica a la vez de emotiva. Menzel y Chenoweth son un dúo que siempre va a funcionar, y es un placer verlas juntas nuevamente en la gran pantalla.

Este cuadro musical también cuenta con el cameo de Stephen Schwartz, letrista y compositor de las canciones de Wicked, quien es el encargado de prácticamente cerrar el segundo acto con la icónica frase de “The wizard will see you now!” (“¡El mago te verá ahora!”)

Son esos “pequeños” y cuidados detalles, como crear sets prácticos, cultivar nueve millones de tulipanes para la producción, construir un tren de 16 toneladas para que Glinda y Elphaba se dirijan a la Ciudad Esmeralda, junto a las estelares apariciones de personas icónicas para el musical lo que confirman las palabras de Chu al decir que este era el proyecto con el cual soñó dirigir por mucho tiempo.

Las emociones priman en Wicked, ya que es una película que llama a sentir, a dejarse llevar por los sentimientos y simplemente adentrarse en la Ciudad Esmeralda, el mundo de Oz, y compenetrarse por completo con estos personajes que por más de veinte años siguen marcando Broadway y que ahora sellarán una rotunda presencia en la gran pantalla. Es innegable el poder que hay detrás de esta historia, iniciando con “El Mago de Oz”, película que marcó un antes y un después con su estreno en el año 1939 y que hoy día, 85 años después, sigue estando vigente en las memorias de todos, siendo comentada y referenciada ya sea en películas, series, libros o en el boca a boca. A la par de “Wicked”, musical que se estrenó en 2003, el cual sigue vigente y que está basado en la novela “Wicked: Memorias de una bruja mala” de Gregory Maguire, historia paralela a los hechos narrados en la película mencionada anteriormente.

“Wicked” al final del día es un digno homenaje al musical, una adaptación que ha dejado la vara muy alta para próximos proyectos musicales, con cameos y sorpresas que logran sensibilizar y que te dejan esperando ansiosamente la segunda parte.

Es reconfortante saber que en un momento donde las adaptaciones de musicales están siendo rechazadas u ocultando los cuadros musicales por temor a que no guste, llegue alguien que decide cambiar eso, quien se entrega completamente a la labor de brindarnos un proyecto digno, de darle a los fanáticos lo que por años han venido esperando y que las nuevas generaciones posiblemente disfruten a lo grande. Así que tomen sus varitas, sus escobas y sombreros más puntiagudos (o coronas, si va más con su estilo) y vuelen al cine, a dejarse envolver por esta fascinante historia.